· Es una reflexión penosa para un hombre considerar lo que ha hecho, comparado con lo que debió hacer ·

Uno no aprende.
Uno no escarmienta.
Uno no va sobre sus errores y ve qué cosa puede hacer de distinto la próxima vez para no errar tanto.
Uno cree, supone que aprendió cuando todo es claridad a la vista. Pero basta de un instante para volver a meterse en el agujero más profundo.
Uno Es. Es uno y sus circunstancias. Uno, por más sensación que tenga de igualdad, siempre va a fallar distinto. "El tiempo no vuelve porque el hombre no puede volver a ser lo que ha sido".

Y me pasa a mi. Y te pasa a vos. Y le pasa a aquél.
Somos eternos estúpidos pero no por creer, por fallar, por ser ingenuos o ilusos.
Somos eternos estúpidos por suponer que aprendimos algo de todo aquello.
Pero... Es inevitable.
Es inevitable no ponernos un escalón más arriba cuando otro viene a contarnos sus penas.
Es inevitable creer que "las sabemos todas" ante el drama perteneciente a otra persona.

Y también es inevitable para nosotros abrir la boca de más y flaquear ante el primer amigo que se nos cruza.
Que muchas veces, lejos de querer alentarnos, nos demuestra que su sapiencia está muy por arriba de nuestra ingenuidad.
¡Y nada más lejos que eso! Porque mientras él se cree sábio... Yo creo que el tiempo terminará por meterle esa sabiduria en los lugares más recónditos de su ser.
Uno es sábio para con uno mismo, no para con los demás.

Pero no aprendemos. Ni vamos a aprender... Claro está.
Ni van a aprender.
Ni voy a escarmentar, ni vas a escarmentar.
Porque no hay de qué hacerlo. Nunca vas a vivir dos situaciones idénticas para poder con una, aprender, y no fallar en la otra.

Quizás el secreto esté en callar... ¿No?
Vos no te sentís estúpido.
El otro no tiene la necesidad de creerse nada, porque no tendrá necesidad de demostrarte nada.
Y el tiempo va a pasar... Y como toda herida, va a sanar... Y como toda marca, va a quedar... Y vas a seguir acumulando rasguños con un sólo fin: creer que ahí está tu aprendizaje, cuando en realidad por dentro deseás otra táctica de enseñanza.

"Afortunado es el hombre que tiene tiempo para esperar "
Pedro Calderón de la Barca

No hay comentarios:

Publicar un comentario