* Argentina. Un país de todos. *

A veces me da la sensación de que en realidad, no estamos tan mal... Sino que simplemente parte de la sociedad se empecina en creer que esto es así. Son más sus ganas de no caminar que lo estancado que pueda estar el país.

En los últimos días gente cercana me hizo recordar algunas "zonceras". Y al mismo tiempo otras me hacian abrir la cabeza y decir -Apa... No lo habia pensado-.
Gente desde sus casas, con sus computadoras o sus celulares con acceso a Facebook haciendo mención a los LCD accesibles mientras se ponian ellos en el lugar del que "se rompe el culo laburando y no le dan nada". Con computadoras y celulares ¿Se entiende éste punto?.

Susana que gracias a la reacción de los afortunados que ganan sus premios piensa que somos todos pobres y ella nos soluciona la vida.

Vivo bajo un techo que me banca la flia, pero a mis hijos no les falta nada. Comen todos los días. Tienen el juguete que quieren. No tengo laburo, pero cada tanto salen cosas copadas que me dejan darme gustos. Mi pareja está peleando por una planta transitoria. Tengo un blackberry. Mi hijo tiene la play 2 y mi hija desde aritos de oro hasta cuna. Pasando por dos millones de juegos y kg.
Quiero una casa, a eso vamos con mi pareja. Si participo en el programa de Susana y gano, ¿Cómo no voy a llorar? ¿Cómo no voy a estar feliz, conmovida?. ¿Esto me hace "pobre" como ella lo define?.

La gente que gasta al rededor de 4 pesos en un mensaje de texto para participar de su programa, y así sean $2, claramente no están en una posición peor que la mía. Sin ir más lejos... Susna no les salva ninguna vida.

Yo, en éste momento estoy en un laburo temporario que se me termina en éstos dias, en donde soy Data entry. Tengo que subir al sistema formularios del Plan Sarmiento. (El plan de Macri para darle las netbook a la primaria). Ya llevo más de 2000 datos, en donde hay gente argentina, paraguaya, boliviana, peruana, y en menor porcentaje ukranianos, dominicanos, taiwaneses y españoles. La gran mayoria con mail y celular.

No estamos como algunos nos ven. Y si todos seguimos caminando por donde sabemos, no nos va a llevar a nuestro peor pasado, no vamos a estar como algunos quieren que estemos.

Me encantaría que de cada diez personas que desean que en éste país, sólo queden las personas que nacimos acá, una le pregunte a un extranjero porqué se fue de su lugar.
Deseo fervientemente que ese deseo se evapore. Desaparezca.
Deseo que de a poco todos aprendan a desear.

* HaY Que aYoRNaRSe *

Es increible mi intento una y mil veces fallido de querer insertarme en ésta sociedad en la que para entrar, hay que tener una cuenta en alguna red social.
Mi intento desmedido por querer formar parte de un conjunto de personas que no hacen más que "tipear" para hacer una especie de corriente, a veces ha sido hasta gracioso.

En la adolescencia empecé a chatear. Era divertido ver cómo una pseudomanada iba al rededor del comentario de un "Nick".
Quise mostrar una faceta divertida, sociable, pero la vida me terminó demostrando que mi fin, en ése medio, era simplemente ser una antipatica. Una agreta. Una mina que conectaba unicamente para contarles a todos lo mediocre que eran. Siendo ella, una mediocre más.
Después me tocó usar el Blog. Blog que en sus comienzo sirvió para hacer letras un gran amor. Blog que desperdicié escribiendo canciones, poemas y cosas hermosas sin ningún sentido.
Vino Facebook y terminó siendo un punto de encuentro. Descubrí que podría tener en mi lista a quien quisiera. Y yo podría estar en la lista de aquellos que nunca hubiese querido.
Descubrí al Facebook como el semillero de aquellas personas que aman contar por algún lado sus situaciones cotidianas:
¡Me fui a tomar mate!-
Hoy iba caminando, me pidieron fuego y yo terminé diciendole "Gracias" JAJAJAJA-
Facebook también fomenta cualquier situación a la que yo llamaría, y cómo decirlo para no molestar... Cualquier situación estúpida:
-Pepe ha respondido una pregunta acerca de ti: ¿Creés que Gabriela se hace el cavado?. ¡Para saber la respuesta, click aquí!-

Sin contar con esa opción, bella por demás, de simplificar todo con un "Me gusta". Es fácil así, "comentar" algo de otro. No hacés más que poner "Me gusta" en el comentario de otro para que ese otro sienta que uno es participe de su vida.

Y vino Twitter. Y no quise suspender mis intentos de insertarme en la sociedad. Me hice una cuenta hace meses, cuenta que intento continuamente "Activar", pero no paso de tres "twits". Termino cansandome por no entender el funcionamiento del sitio.
Afortunadamente tengo una pareja muy ayornada, pero aún así... Se me dificulta un montón.
Descubrí lo que es el hashtag. Y en mi intento desenfrenado de, ya saben qué, empecé a comentarlos. Para que de esa manera, otro pueda saber que existo.
Claramente no dije nada lo suficientemente conmovedor como para que otro me siguiera.
7 seguidores. Tengo 7 seguidores.
Tengo 3 menciones, las tres de Nacho.
A veces me da por pensar que no me funciona bien. Que mi twitter tiene algún virus extraño que no deja leer al otro lo que pongo.
Pero vuelvo a entender que es un consuelo estúpido, tan estúpidos como mis recurrentes actos por querer formar parte de un medio el cual no termino de captar.

Quiero ser popular. Quiero que mi palabra llegue a más de diez personas y que esas personas entiendan que lo que tengo para decir, no es tan importante a veces. Pero que me lean. Que sepan que estoy.

Sé que es un tema de terapia.

También sé que las personas que tienen cierta popularidad es simplemente porque les gusta ésta serie de cosas y que quizás a mi no me terminen de gustar tanto pero... Juro que intento constantemente en ser una más.
Espero, algún día me salga.

~ Michelle ~

Acá... Junto con amigos... Amigos que hablan de todo, sin siquiera a veces decir nada.
Hace un rato tuve el deseo de escribir acerca de una mujer. Esa misma mujer de la que hablé antes... Pero desde que me senté, no paré de cagar a pedos a Nicole.

Está al lado mío... Me mira, mira mis dedos. Piensa que escribo rápido porque de alguna forma extraña alguno me dio ese dote.
Mira de reojo la pantalla, no porque le interese lo que escribo sino porque le encanta la idea de ver cómo el reflejo extraño forma tintes de color sobre algo blanco.

También escucho a Nacho y a Michelle hablando de la vida en su totalidad...

Michelle. Que mujer que habla de la escencia de la vida en todos sus aspectos.
Y mientras me pongo una campera ya que el frío hiela mi sangre y escucho a Nacho que le dice a Michelle que la conoce más por mi que por ella misma, y que si me ve preocupada por ella, él se preocupa... Entonces, le pregunta: porq pensás q está más preocupada? por preocupona o perseptiva? hablá, ella no te esucha... Mientras, yo... Pienso...
Michelle... Mujeres hermosas por donde las mires, sí las hay.
Michelle... Esa personita, esa nena que me tocó cruzar una vez, mientras yo jugaba con la prima... Una nena que jamás, hubiera creido... hoy sería lo que es.
Michelle... Que entró con un porte a los exploradores que... a más de uno dejó lasio.
Michelle, una nena que se pintaba, no mucho. Que le daba desde chiquita un color a la cara... Un color claro que quizás buscaba aclarar un poco de toda esa oscuridad...
Oscuridad que ella no tuvo, no tiene y jamás tendrá... Pero oscuridad que no deja de querer, continuamente, taparla.
Michelle... Una nena que empezó a ser una mujer desde muy nena y nadie se dio cuenta... Loco... Nadie se dio cuenta.
Nadie se dio cuenta y ella empezó a crecer... Nadie se dio cuenta y ella empezó a escuchar... Ella empezó a pensar.
Nadie se dio cuenta y ella empezó a sentir...
Michelle... Una chica que tiene un resultado psicológico con el mote de: trastorno de personalidad.- simplemente porque le tocó hablar adelante de unos licenciados.
Michelle, una mujer a la que no le quedó otra que pasar por loca, incoherente, irresponsable, simplemente por decir lo que piensa.
Michelle, la explicación exacta de la definición "decir lo que uno siente".
Personas que se llenan la boca diciendo que dicen lo que piensan... Dicen lo que sienten... Deberian toparse con ésta mujer y escucharla de verdad, sin ningún cartel de fuma base, y darse cuenta esa caterba de idiotas que eso, ESO es decir lo que uno siente...

Y escucho "Un Pacto" y la frase de -Si para tenerte aquí había que maltratarte... No puedo hacerlo, sos mi Dios- me deja sin más que acotar. Diciendo en un par de palabras lo que siento por ella...
Si para no perderla tengo que dejarla consumir a mi lado... Michi... Consumi adelante mío. Pero, Michi... Por favor... Y con lagrimas en los ojos... Consumi al lado mío. Pero no te consumas.

Michi... Nena, mujer, ser, cuidate.

~Un pacto para vivir...~

Escuchar esa canción significan tantas cosas...
Hoy la escucho y me da placer, pero si dejo que mi mente divague... Viaje en el tiempo, viaje en mis sensaciones, me recuerda a una época de mi vida en la que la felicidad parecía no llegar nunca.
La felicidad parecía haber venido por casa, para quedarse unos meses e irse y no retornar más.
Escuchar éste tema, y dejando viajar a mi mente, me retrotrae a un Cristian, el mismo Cristian que hoy da diez mil vueltas para divorciarse. Ese Cristian, tal cual, es el que me enamoró algún día, y me largó "a la suerte".
Y mientras yo transitaba... Buscando un poco de esa suerte... Deseando un poquito de felicidad. Buscando gente, soluciones, respiros, suspiros, abrazos y besos, escuchaba ésta canción.
Es increible cómo una misma canción nos trasmite dos cosas diferentes de un mismo ser.
Es increible que aún hoy, que estoy muy lejos de ése amor que alguna vez sentí, la piel se me ponga de pollo igual.

Lejos de ese amor, no porque no pueda enamorarme o me enamore menos... Lejos porque realmente, fue un amor que no me hizo bien.
Un amor que me intoxico. Que sin darme cuenta me marchitaba por dentro.
Que tenía una máscara... Una con una sonrisa. Pero que cuando se caia eran puras lágrimas.
Un amor que me hacía llorar de una manera en la que jamás, pero jamás volví a llorar.
Un amor que me clavaba el más profundo de los dolores en el medio de pecho.
Un amor que se desdibujaba a medida que el tiempo pasaba... Un amor con un hijo de cómplice. Un par de ojos que sin darse cuenta veian pasar la más grande catástrofe emocional que cualquier persona podía sentir.
Amor que dejó de ser amor y se convirtió en pena. En pesar. En una mochila cargada de tristeza.

Un amor que hoy puedo decir... No fue lindo.
Tuvimos un bebé. Un hermoso nene que día a día crece cada vez más. Un hombrecito que va a tener su mirada, sus gestos, sus palabras, pero que ruego... No tenga su pensar.
No tenga su pesar. No tenga toda su pena.
Pena que él se acostumbró a llevar encima, y que yo no pude compartir.
Pena que yo no quise arrastrar más.

Este tema, que va a seguir pareciendome hermoso, me demuestra lo poco feliz que fue ése sentimiento.

El amor es como un caleidoscopio. Tiene muchas caras. A medida que lo vayas girando, vas a ver otras cosas, pero eventualmente vas a volver a la primer visión.
Con él, no vi esa primera. Seguí girando, seguí viendo las demás imagenes... Esas que en ése momento me servian, y cuando finalmente volví al lugar de donde partí, logré ver toda esa miseria que me es fuerte siquiera describirla.

Continuamente intento no faltarle el respeto con mis palabras o mis pensamientos. Pero el dolor fue tan grande, y tardé tanto en verlo que... Temo, no tengo definiciones felices.
Necesitaba oir su voz y verlo actuar nuevamente para darme cuenta que su "tranquilidad" a mi logra inquietarme.
Necesitaba iniciar mi divorcio para notar que en sus prioridades, jamás estuvo "la familia".
Necesitaba éste "reencuentro" para entender que todavía no maduró. No entendió. Jamás vió, escuchó, y me atrevo a decir que nunca sintió.

Amores que te destrozan sí los hay... Por suerte ya no duele... Pero me encantaría poder hacer letras todo ese dolor que recorrió mi cuerpo durante meses... Años. Amor que no me dejó volver a creer. Cuando en realidad más que volver a creer era "conocer realmente la verdad". Amor que me mintió y se pintó la cara de colores bonitos haciendome creer que era para siempre. Que era verdadero. Que después de él, no iba a haber más nada. Más nadie.

Amor cruel que se disfrazó de un lindo sentimiento y terminó destrozandome.
Terminó convirtiendome en ésto que día a día, gracias a Ignacio, intento hacer desaparecer.
En ésto que sufre ante lo más mínimo. Esto que necesitó de años para volver a confiar. Esto que se ilusionó, apostó, y terminó quedando multiplicado y solo.

Sólo una persona se entregó al sentimiento. Sentimiento doloroso. Ahora se volvieron dos. Dos que van a quedar marcados a fuego por el resto de sus vidas.
Mi meta es ayudarlo a crecer con el menor dolor posible. Y si es necesario, negarle tanta infelicidad.
Espero no equivocarme.
Hijo, espero no equivocarme.

Un pacto para vivir,
odiandonos sol a sol,
revolviendo mas,
en los restos de un amor,
con un camino recto,
a la desesperación.
Desenlacé en un cuento de terror.

Seis años así,
escapando a un mismo lugar
con mi fantasía.
Buscando otro cuerpo,
otra voz,
fui consumiendo infiernos,
para salir de vos,
Intoxicado, loco y sin humor...

Si hoy te tuviera aquí,
cuando hago esta canción,
me sentiría raro.
No tengo sueño,
mi panza vibra,
tuve un golpe energético,
milagro y resurrección
y eso que estaba tieso,
bajo control.

El poder siempre mata,
si para tenerte aqui
habría que maltratarte...
No puedo hacerlo
sos mi Dios.
Te veo me sonrojo y tiemblo
que idiota te hace el amor,
y hoy quiero darle rienda,
a esta superstición...