· CASI Locura ·

Situación incesante.
Caos constante de un sin fin de sin sentidos desperdigados dentro de cuatro paredes.

Gritos que no dicen nada y pensamientos que se retuercen en si mismos tratando de encontrar algo bueno.
Rostros conocidos, personas familiares, y nuevos sentimientos que sólo guardan remordimientos.

Frases, palabras y hasta insultos que se resbalan de las bocas.

Falta de amor.

Amor mal manejado, mal sentido, o simplemente no compatible conmigo.
Maneras de amar inexplicables. Maneras de amar casi sin sentido.
Formas de ver las cosas de un modo más que obtuso. Forma de vivir casi inverosímil.

Cuatro paredes que encierran la misma cantidad de verdades, que de mentiras.
Personas que eligen siempre como mejor opción la segunda clase.

Mi cabeza se detiene en un momento de sólo pensar...
No encuentro realmente un horizonte en ésta situación. Y el único final que le puedo dibujar, tiene sólo tintes negros.

Tuve suerte...
La vida, claro que la vida, me regaló un par de personas que saben de dónde y cómo agarrarme.
Tres personas que tienen suficientes pañuelos para secar mis lágrimas.
Tres personas que saben a dónde no meter el dedo... Conocen la llaga.
Tres personas lo suficientemente fuertes como para atajar mi cuerpo, antes de que éste bese el piso con la más grande de las derrotas.

Y hasta quizás haya tenido suerte también, de crecer en ése mundo casi inverosímil.
Un mundo que nunca entendí cómo ni en dónde empezó... Una vida que todavía no sé a dónde va a terminar.
Sé que va a ser de mi, y de la familia que elegí formar.
No sé qué será de ellos y su baúl repleto de cosas, que encierran 12 llaves y que simplemente lo hicieron por "buena voluntad".
Voluntad que aún no comprendo cómo funciona... Lo de "Buena", lo dejo a criterio del que conozca de lo que hablo.

Si pudiera regalarles un poco de sinceridad, sentido común, buen gusto y respeto... Lo haría.

Algo.

Y cuando me di cuenta... Estaba tirada sobre la punta de la mesa, y del otro lado mi vieja.

Resulta que yo estaba mambeada... Encima con un dolor de muela insoportable. Cualquier cuestión distractiva me iba a venir de pelos.
Y me entré a hacer la cabeza con ésta situación:
Me iba parando.... Como en cámara lenta... Y después de la décima oración inútil de mi vieja salto sobre ella gritandole: CALLATE. CALLATE. ¿NO TE DAS CUENTA QUE A NADIE LE INTERESA ESO QUE DECIS?. VOS... VOS Y TODOS ESTOS... HIJOS DE PUTA.- mientras giraba señalandolos a todos, uno por uno.
¿Qué todos?. A mi vieja, mi tía, y si mi tío andaba cerca también... Pobre mi tío... Yo lo quiero... En fin...
Todo eso era porque ya me había cansado de mi mamá. Mi mamá, persona que sólo se queja. Siempre es una cacrificada... Siempre hace más que todos.
Siempre se hace la sensible... La mujer sentida, cuando en realidad los sentidos y los sentimientos le importaron un carajo.
Mi mamá... Una mujer que sé... La pasó... La sufrió un montón... Pero también prefirió fritar su cerebro en vez de usarlo.
Mi mamá... Sólo me enseña a ser hincha pelotas. Sólo me da quejas.
Si no fuese por los billetes seria incapaz de demostrarme amor.

En el instante, en el que en mi mambo eso lo estaba haciendo de a deveritas, sentía que era capaz de decirles hijos de puta.
Que podía justificar detalladamente el porqué de ese motivo para cada uno. Y que no había sangre que sencibilice la situación. Yo era capaz de decirles hijos de puta.

Y volví en mi... Y me fui con mi hija... Con mi gordo... Y con mi pendejo. A ser felices.

* Siempre Me Deja Escribirlo... *

Me gustaría poder inventar una manera nueva de describirlo... Pero por caer en eso hasta el final de mis días voy a intentar describirlo.
Es exacto el momento en el que empieza a recorrerte el cuerpo.
Absolutamente todo el cuerpo...

El instante en el que te recorre el cuerpo dejás de sentir el peso que tenías en él y comenzás a relajarte.

Después es tu cabeza quien se relaja...

Son tus pensamientos los que caminan cada centímetro del cuarto en el que estás.
Tus palabras, las que comienzan a bailar adentro de tu boca... Peleando por salir.
El sonido que empieza a ser parte del bals que se baila en tu cabeza.
Y vos... Sentado... Empezás a sentir así...

Y lo que veias ya lo ves de otra forma.
Si estabas enojado, te pinta una sonrisa y te deja perdonar.
Las molestias comienzan a volar, y el viento se las empieza a llevar... Pero te las deja en la puerta.
Si estabas contento te regala el momento más intenso.
Si estabas distraido te deja ocuparte de algo. Siempre una cosa nueva tiene para dejarte.

Te permite encontrar un camino de tranquilidad.
Un momento pacífico que querés, se extienda en el tiempo para siempre...
Tenés ganas de que cada segundo de tu vida esté repleto de esa paz...
Tenés la oportunidad de aprender a dominar el mundo.

Ese mundo que cada tanto lastima. Ese mundo al que llamo mundo por no tener que enumerar a las personas, los sentimientos, las situaciones, las consecuencias, los motivos, etc.
Mundo que puede ser tan grande como uno elija.

Entonces empezás a entenderlo. Aprendés a manejarlo... Hasta que lo dominás.
No sabés por cuánto... No sabés porqué. Pero sabés cuándo.

Cuando estás careta simplemente te tenés q acordar....

El Faso... Yo... Y Mi Otro Yo...

Una vez más siento la necesidad de respirarte en los ambientes mas oscuros.
De desafiar las leyes de la gravedad. Falsa alegria cambiada por tu cianuro...

Necesidad de unirme al ghetto de los que apelan a besarte. En escondites bien secrteos
con la locura como estandarte.

No te permito que me saques todo el hambre , que me acostumbres a atar todo con alambre...
Me das mil canciones de buena madera. Cualquiera estación para mi es primavera con vos,
pero cuando te vas me dejás con la más dulce pena matandome adentro. Y un otoño vacio en el centro que sólo se llena con un poco más de tu escencia en las venas.

Me pongo goma, me pongo parlanchín, voy rebotando de Argentina hasta Japón, me cuelgo con historias que no tienen fín y me procupo por problemas sin solucion.

Voy escuchando Dancing Mood, la sonrisa de oreja a orjea es un problema de actitud y ahora los dejo pensando con esta moraleja...

"Ponete bien si no hay quien salte y no hay un cobre. Que de ésta miel mejor que falte y no que sobre"
Te dan mil canciones de buena madera cualquiera estación para mi es primavera con vos
pero cuando te vas...
Me dejas con la más dulce pena matandome adentro. Y un otoño vacio en el centro que sólo se llena con un poco más de tu escencia en las venas.

Que algo tan lindo me haga mal es una pena. Me hacés poner una de cal veinte de arena.
Me das mil canciones de buena madera. Cualquiera estación para mi es primavera con vos
pero cuando te vas...
Me dejás con la más dulce pena matandome adentro, y un otoño vacio en el centro que sólo se llena con un poco más de tu escencia en las venas.
Las pastillas del abuelo; Calipso.

En la canción del Sensei también puso una frase digna de ser repetida: Empieza el ritual, nadie dice nada pero yo lo siento igual, la desesperada gana, de querer viajar con tan sólo una pitada a otra realidad que sea mejor.

Para mi no te cambia la realidad, sino que te deja verla de otra forma...
Hoy leía la revista THC, un psicólogo comentaba que la realidad, en realidad, no existe.
Y no me parece tan loco...
La idea de que la realidad no existe, sino más bien combinaciones, sumas, restas de situaciones que la arman.
También que si las palabras dejaran de existir, también dejaria de existir el tiempo...

Todas esas cosas, hoy se las quiero regalar.

Fasum-Interruptus.
Así se lo llama al faso que te fumás, para poder escribir, te ponés a escribir y te cae gente... No te queda otra que poner la mejor cara de careta y no me da tiempo para irme a donde quiero con mi mente.

Basta.

* Fumar Marihuana Me Hace Mejor Persona *

No es una forma absurda de entrar en debate.
Tampoco es, de ninguna manera, fomentar el consumo de drogas. Ni hacer apología al respeto.
Es, meramente, mi pensar. Mi sentir. Y mis ganas de darlo a conocer.

¿Para qué?. Para que comprendan que una cosa no quita a la otra.
Que no porque alguien consuma tal o cual cosa, ese alguien va a ser distinto. Distinto para peor.

Hay diferentes formas de usarlas. Hay distintos métodos, infinidad de motivos. Pero no quiero hablar de estadísticas. Quiero contar acerca de mi vida.

El otro día comentaba con una amiga que la marihuana, el fumarla, me había abierto puertas que estaban cerradas. No que no sabía que podía abrir, sino que simplemente prefería guardar la llave "para después".
Puertas que a diario postergaba entrar. Simplemente porque "después iba a ser el momento". Y así fue que no las abrí... Y así fue cómo me tocó golpearme contra ellas... Pero bueno, eso es otro tema.

Y ahora, me encuentro del otro lado de la puerta.
De una de las puertas. Y ya atravesé varias... Y me faltan varias más.

Hace que aprenda día a día a interpretarme.
Hace que entienda que todo puede ser de una forma más pacífica.
De ahí viene el "mambo" de "Bob marley" con esos temas suaves... Lentos... Que te hacen balansearte como flotando.

Me deja ocuparme de mis hijos, de esa manera, en la que no sienta que me estoy ocupando.
Hace que los cuide mientras me cuelgo mirandolos vivir. Mientras me atrapan esos caprichos que en otro momento me enojan.
Me facilita la busqueda de palabras para poder contar una idea.
Me regala la espontaneidad más natural de todas. Esa que siempre me costó generar.
Me permite ver más de una posibilidad a la hora de elegir. Me deja sentirme segura. Algo que nunca pude lograr. Ser segura. De algo, de lo que sea. De una cosa al menos.
Me deja poder cumplir con mis 'exigencias' y las exigencias de los demás.
Me permite no saturarme. Me deja poder compartir esos momentos que, si no fumara marihuana, diría "ahora no puedo, más tarde".
Hace que deje de postergarme. Y hace que, entre nubes, siga avanzando sin estancarme.

No me saca de la realidad. Me muestra aquella que no veo.
Me permite ser útil, constantemente.
También me distrae, y a veces deseo no haberla fumado en "ese momento". Pero inmediatamente, generalmente, encuentro la punta del ovillo.
Me saca las más bonitas sonrisas. Esas que siempre preferí guardar para después.

Hace que mi "después", sea ya. Sea ahora, hoy.
Me enseña a que, aún cuando no la fumo, siga ese camino que me mostró.
Es mi fiel compañera.

No voy a hablar de adicciones, quizás no me convenga.
Sí voy a hablar de necesidad.
Confiezo que más de una vez para no entrar en conflicto. Porque estoy enojada y prefiero no seguirla para no terminar llorando. (La bronca me brota en lágrimas, es una cagada...). Más de una vez elegí fumarla.
Buscar un bache. Una salida al kiosco, una salida al patio. Una vueltita... Un par de secas... Unos besos ayudan a calmar las aguas. Mis aguas.
Esas aguas que por momento se hacen turbias. Esas aguas que sentís que si no sacás rápido la cabeza a la superficie te morís, loco.
El faso me hace flotar. Nunca me voy a ahogar, entendés?.
Y sí, suena a conversación de "mambeada". Pero si sos tan obtuzo, sacale lo de "marihuana" y ponele "la amor de mis hijos", vas a ver que es igual. Pero real.

Un sentimiento hace que saquemos lo más bonito.
Nos muestra desnudos ante otro, igual de desnudo que nosotros.
Hace que nos saquemos el corazón, literalmente, y se lo demos en mano a alguien más.
Un sentimiento te colma. Te hace suspirar... Y también te paraliza.
En cualquier momento, no "en el menos pensado", en cualquiera, cuando se le ocurre, cuando se le canta, un sentimiento te apuñala.
Te deja pelotudo. Te deja tambaleando en medio de Rivadavia un Domingo a las 6 de la mañana.

Esto a lo sumo se me sube mucho a la cabeza y me crea una paranoia que termina a los 45 minutos.
Me deja voler rapidamente a mi mundo, y que yo elija, de todo aquello que pensé en esa hora y media de "mambo", lo que conviene para mi vida.
Es un tipo mágico que te agarra, te lleva a dar una vuelta, a conocer miradas, palabras, gestos, y te deja a la hora en la puerta de tu casa.
"Manejate".

Son las ganas de expresar constante. Por eso sigo escribiendo. Porque me da un resto increible para seguir definiendola.
Y también, me invita a ver ésta sensación desde todos los puntos.
Me invita a participarte, a vos que leés, que ésto me pasa a mi. Esto siento yo. No porque la fumes vas a sentir igual.

Consumo, a diario y tengo dos maravillosos nenes que... Para qué contarte. Son los pibes más lindos que conocí.
Dos nenes que con ésta mamá fumona, juegan, se bañan, comen, van a la escuela, ven amiguitos, ven a familiares, se rien a diario.
Dos nenes que con ésta mamá fumona, saben de la felicidad mucho antes de poder saber que existe.
Tengo una pareja de lujo. Que consume conmigo. Y que me invita, todos los días, a formar parte de la familia esa que uno siempre quiere tener.
Que me invita al dialogo. A la mediación. A la tregua.
Que me saca de mis casillas y al instante vuelve a ponerme en su lugar.
Un hombre que opta por ésto como estilo de vida.

Yo no sé si el consumo de algo les hará la vida más fácil.

Muchos, por más faso, pastilla, merca, base que se metan, siguen buscando alguna respuesta.
Pero sé que a mi, me deja transitar con armonía. Me aclara el panorama.

Me hace, sin lugar a dudas, una mejor persona.

* Te cambio un tema de Dave Mattews por uno de Nonpalidece *

Mi mente está queriendo volver, desesperadamente, a mi vida hace... No sé. 19 años.
En donde podía encerrarme en la pieza... Sentarme en la compu... Poner un tema y dejar mi vida fluir unicamente por medio de letras.

... Donde nada me hubiese distraido.
Ni una mamá. Ni un hijo.
Ni un tío, una tía. Una bebé, una pareja.
Ni Tinelli.
Tinelli... Que tipo que hace que me ocupe, unas horas, unicamente de él. Un tipo que logra que piense en otra cosa más que en esa porqueria de programa que tiene.
Sabe distraerme. Sabe.

Y vuelvo en mi y a mi presente y siento que... Sí. Te cambio un tema de Dave Mattews por uno de Nonpalidece.
Cambio ese pasado tranquilo por ésta tranquilidad de saber, nunca me va a faltar éste descontrol.
Cambio esos momentos al pedo que eran eternos por ésta casi hora de recreo.
Elijo ésto. Claro que sí...

Y elijo poder ser racional hasta el dolor con respecto a mis relaciones.
Entiendo que elijo no porque sienta, sino porque aprendí a pensar.

El amor no es causa primordial para aceptar una relación.
El amor no nos salva una separación. No nos salva un parentezco.

Elijo a mi familia porque me hace bien.
Porque me lleva a ese delirio infinito y a esa ciclotimia extrema.
Porque me regala ésos momentos, esos que uno los pone en la "famosa lista de su sueños".
Elijo a mi familia porque sé, tengo más que un sentimiento para ellos.

Y al gordo lo elijo porque le pone gusto a mi vida.
Porque me saca de mi letargo, porque me regala algo más copado que simple letanía.
Porque rompe con mi rutina y mis estructuras de vida.
Porque le da ese movimiento que me marea hasta las náuseas pero no me deja caer.
Porque me deja concentrarme en él y hacer que broten de mi los más lindos sentimientos.
Porque me deja pensarlo sin temer. Sin sufrir, aunque me provoque el dolor más profundo.
Porque alimenta mi depresión, hasta el punto de tener que sacar de mi métodos productivos, creativos, para poder matar ésa sensación.
Lo elijo porque sé, no tiene sólo momentos de felicidad para mi. Porque se va a ocupar siempre de sacudirme sin golpearme.
Porque conoce mis puntos débiles y sufriría más haciendolo sufrir... Es filoso en las revanchas.

Porque me invita a una vida menos careta. Más a cara lavada.
Más a entender que uno puede sentirse de barrio, pero también puede sentirlo sin pertenecer a él.
Porque puedo mudarme de Piedrabuena sin dejar de saber, "la gente de acá necesitan mejores cosas".
Porque me deja sacar la conclusión de que no necesito sacrificar mi futuro en lo que fue mi hogar 26 años.

Porque me enseña día a día a separar el sentimiento de la razón. Inclusive si él no piensa igual.
Lo elijo porque sé... Si algún día terminamos, me va a dejar siendo mejor persona.
Porque inclusive con esas cosas que no me gustan, logra que saque una conclusión gustosa.

Usar el sentimiento para dar motivo de una relación se me hace poca cosa.
Poca cosa e incompleta.